30.01.2024 La prevención es clave para evitar riesgos sanitarios en la población, para ello se han unidos múltiples actores bajo el propósito común de cuidar este sistema.
Incentivar el buen uso de la red de aguas servidas, además de poner en conocimiento a la población sobre los riesgos de las obstrucciones en el sistema de alcantarillado, es parte de los elementos de la campaña “Alcantarillado no es Basurero”, una iniciativa de Aguas Antofagasta, ECONSSA, TRATACAL, DIRECTEMAR, Seremi de Salud y la Superintendencia de Servicios Sanitarios.
Cada año en la región se registran más de 130 toneladas de residuos en los alcantarillados de las distintas localidades de la región, dentro de los elementos, ajenos al correcto uso de la red, es posible encontrar productos químicos, basura domiciliaria, neumáticos, productos tóxicos y aceites, entre otros elementos que pueden generar graves obstrucciones en los ductos y colapsar el sistema llevando a eventuales riesgos sanitarios. Debido a esta situación que afecta a la red, es que los distintos actores involucrados se han unido en torno a esta campaña que busca generar conciencia e incentivar el cuidado del alcantarillado.
En el ámbito de la salud de las personas, la SEREMI de Salud de la región, comenta su activa participación en esta iniciativa, ya que el rebalse de aguas servidas por elementos que no deben desecharse a través de la red implica un importante riesgo para la salud de la población, así lo comenta la titular de la cartera Jessica Bravo
“Los residuos de aguas servidas pueden ocasionar enfermedades diarreicas agudas, disentería, parasitosis intestinal y hasta hepatitis A. Por lo tanto, todo esfuerzo para concientizar a la población en torno al correcto uso de la red de alcantarillado es muy necesario y representa un bien para la salud pública”
Otra de las aristas relacionadas con el cuidado de la red de alcantarillado dice relación con el medio ambiente acuático, en este sentido desde la Gobernación Marítima señalan que la acumulación de deshechos en los ductos puede provocar el rebalse de aguas servidas, la cual inunda tanto las calles como borde costero, derivando, en el peor escenario, a la playa y contaminando arena, rocas, recursos naturales y el mar.
La autoridad marítima, encabezada por Capitán de Navío LT Domingo Hormazábal Figueroa, explica las implicancias de una situación que es posible prevenir con la acción de la comunidad.
“El agua residual sin tratar puede provocar una alteración de los ciclos naturales de los ecosistemas acuáticos y la degradación de la calidad de agua en playas y sectores recreativos. Es por esto, que se le pide a la ciudadanía que no contamine los alcantarillados con objetos y residuos que pueden obstruir la red de aguas servidas, debido a que causa un efecto dominó en el sistema, llegando a situaciones graves como la contaminación de ecosistemas acuáticos terrestres, marinos y continentales. Cuidemos nuestro sistema de alcantarillado como una forma de cuidar nuestra ciudad, nuestros recursos naturales y nuestras playas”.
Las plantas de tratamiento en la región suelen recibir los residuos y se suman a esta iniciativa conjunta en el entendido de que la unión de voluntades permitirá propender hacia la construcción de sostenibilidad.
"Asegurar que las aguas servidas, libre de elementos ajenos, puedan ser tratadas en el sistema de disposición es cuidar la ciudad y su entorno. El esfuerzo de la comunidad, autoridades y empresas sanitarias, desde su propio espacio y responsabilidades, debe permitir que la recolección y tratamiento sea realizado en una condición segura y sostenible para todos”, indica Aníbal Torrejón gerente de Ingeniería y Administración de Concesiones de Econssa.
El cuidado del sistema de alcantarillado, no sólo garantiza el buen funcionamiento y la protección de la salud de las personas, sino que, también, contribuye a mejorar el medio ambiente ya que los residuos son dispuestos en los lugares que corresponde, promoviendo un sistema eficiente en el tratamiento de los distintos elementos que desechamos a diario y haciendo de nuestra región un territorio más limpio y amigable con el medio ambiente.
“Con pequeñas acciones es posible reducir la importante cantidad de elementos que son depositados en el alcantarillado y prevenir eventos medioambientales complejos y cuidar de la salud de las personas, por lo que el llamado es a cuidar la red y denunciar cualquier acción que ponga en peligro el normal funcionamiento de este sistema. Como sanitaria hemos hecho grandes inversiones en fortalecer esta infraestructura para ir a la par con el crecimiento de las ciudades, pero se necesita apoyo desde la comunidad para poder cuidarlo”, señala Paula Carrasco directora de Asuntos Corporativos de Aguas Antofagasta.